Equinoccio de Primavera en algunos enclaves prehistóricos de España.
Y llegó la primavera. El equilibrio entre la luz y la oscuridad. El este y el oeste. El equinoccio de primavera y el de otoño, donde la noche y el día duran lo mismo. Los mejores marcadores astronómicos que desde la prehistoria han servido al hombre para entender los ciclos de la naturaleza. Nuevamente se renueva y revitaliza la tierra y con esta luz del sol que la insemina y se proyecta en cada uno de nosotros, de los animales y de las plantas, avanzamos hacía el verano. Hacía la luz. Muchas religiones y creencias de todos los tiempos, se han apoyado en la primera luna llena de la primavera para celebrar la llegada del nuevo año, la llegada del cordero pascual, ritos de fertilidad o la adoración al sol, en sus diferentes interpretaciones. Muchos lugares de España, reciben hoy la luz del sol de una forma especial, directa y han sido diseñados especialmente para este momento, como es el conjunto megalítico de los dólmenes de Antequera, donde nuevamente el dólmen de Viera, será iluminado completamente por el sol en esta mañana de primavera.
Otros lugares como la Cova de Parpalló, en Gandia, reflejan los rayos del sol en la cavidad más interna de la misma, haciendo que se halla estudiado e interpretado por los especialistas, como uno de los mejores marcadores astronómicos en cuevas habitadas durante largos periodos desde la prehistoria.
Estos lugares, tanto dólmenes como cuevas y abrigos, y posteriores construcciones milenarias como las catedrales góticas, además de reflejar perfecta y exactamente los rayos de sol de una forma especial, han sido considerados por muchas personas a lo largo de los tiempos, como lugares cargados de un halo especial, sobre todo en estos días y probablemente así sea, puesto que sin duda, son los lugares más frecuentados y visitados por miles de turistas sobre todo en estas fechas, que se desplazan hasta allí, tan solo para disfrutar de esos pocos minutos en los que el sol les iluminará en el interior de estos templos solares.
Por tanto, hoy y los siguientes días, son perfectos para alejarnos de la ciudad y reencontrarnos con la verdadera naturaleza y los ciclos solares, las flores, los animales e incluso nosotros mismos.
Así pues, Feliz Primavera desde Viajes a la Prehistoria.
Os dejamos con un enlace de los cultos al sol en el interior del dólmen de Viera.