MURCIÉLAGOS EN LA PREHISTORIA

MURCIÉLAGOS EN LA PREHISTORIA

 

Hoy hablaremos de murciélagos, esos pequeños habitantes que podemos encontrar en muchas cuevas y que según algunas evidencias ya habitaban en la prehistoria, e incluso antes  y en algunos casos eran más grandes que los actuales y caminaban a cuatro patas.

Desmintiendo el mito

A pesar de que las leyendas y la literatura o el cine nos conducen siempre a pensar que estos animalillos nocturnos pueden dañarnos, nada más lejos de la realidad. No son agresivos, no muerden casi nunca, tan solo cuando se les coge y por lo general suelen quedarse quietos cuando algo o alguien les supone una amenaza. Así cuando visitemos una cueva y nos encontremos por sorpresa con estos habitantes misteriosos, desde luego no debemos temerles ni molestarles. Simplemente intentar pasar desapercibidos y continuar nuestro camino, como sino estuvieran allí.

Durante el día, los encontraremos casi siempre durmiendo en el interior de las cuevas y por la noche saldrán a cazar insectos. Y son excelentes controladores de los mismos.  Son capaces de ver en la oscuridad guiándose por las ondas de alta frecuencia, aunque nosotros no somos capaces de percibirlas.

En España podemos encontrar hasta 29 especies diferentes de murciélagos en diferentes cuevas repartidas por todas las Comunidades Autónomas.

Murciélagos en la Prehistoria

Visto que su antigüedad se remonta mucho más allá de la prehistoria, desde luego que nuestros ancestros convivieron con ellos. Pero ¿Existen evidencias de esta convivencia?.

Para llevar a cabo este tipo de investigaciones, se recurre a la búsqueda del murciélago fósil. Encontrarlo resulta en ocasiones complicado por su pequeño tamaño y la fragilidad de sus huesos, pero donde es más fácil encontrarlos es en el interior de las cuevas, donde ellos forman las colonias que pueden ser de hasta 15.000 murciélagos.

Fuente imagen: nacion.com

En España los restos fósiles más antiguos se remontan al Oligoceno[1], aunque en el pleistoceno son muchísimo más abundantes.

El descenso de su tamaño, haciéndose más pequeños sus dientes también es una característica que se observa con el paso del tiempo, pero curiosamente hace escasamente un par de años se encontró en Nueva Zelanda, en los sedimentos del Lago Manuherikia. La especie en cuestión se conoce como Mystacina Tuberculata o murciélago prehistórico. Podía ser hasta tres veces más grande que en la actualidad y una característica importante es que podía caminar a cuatro patas, esconderse en la arena para cazar mejor. Así que seguramente comería algo más que insectos.

Fuente imagen: puranoticia.cl

Cuevas con murciélagos en España

Son muchas y reciben diferentes nombres, algunas simplemente les sirven como refugio e incluso están protegidas para que su hibernación no sea interrumpida. Otras reciben precisamente el nombre a raíz de las colonias de murciélagos que habitan en su interior, como la cueva de los murciélagos de Zuheros, en Córdoba o la Cueva de los Murciélagos de Granada.

Pero hay más. Los murciélagos o sus excrementos en este caso, que han sido utilizados como abono en muchas ocasiones, han sido protagonistas del descubrimiento de algunas cuevas con Arte Rupestre en España, como la siguiente historia que les voy a relatar.

Descubrimiento de la Cueva de la Pileta en Málaga

Corría el año 1905, cuando el agricultor que arrendaba los terrenos de la finca José Bullón, decidió introducirse en una sima próxima por donde había visto que por la noche salían muchos murciélagos. Su interés era aprovechar el guano para abonar la tierra ya que se sabe de sus fantásticas propiedades para este fin. se introducía por una de sus oquedades de difícil acceso, hasta descubrir las maravillosas pinturas que guarda en su interior.

Los murciélagos como mensajeros de un secreto oculto que convirtió a la población de Benaoján en protagonista de las fantásticas pinturas rupestres de la «Cueva de la Pileta».

Y terminamos con una frase que diría Breuil a Bullón sobre la misma:

«No permitas que nada dañe la cueva, sus pinturas son un tesoro que no tiene precio»

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© Viajes a la Prehistoria

[1]http://www.mapama.gob.es/es/biodiversidad/temas/conservacion-de-especies-amenazadas/090471228015efba_tcm7-21139.pdf

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