Aunque a estas alturas es difícil de vislumbrar el arte rupestre dado el grado de deterioro y vandalismo ocasionado en esta cueva, todavía podemos observar con tratamiento digital, algunos restos de las pinturas que decoraron este singular abrigo con vistas al río Albaida y enclavado en lo alto de un paraje digno del paleolítico mediterráneo.
No es de extrañar, que como tal, la Cueva de la Petxina no nos diga nada. Pero si decimos que muy cerca, se encuentra la famosa “Cova Negra”, la cosa cambia. Esta cueva, de la que hablamos en un artículo más extenso, fue en su momento morada neandertal, y está siendo excavada desde 1928-1933, hasta la actualidad, con hallazgos realmente importantes para el conocimiento de esta especie tan enigmática que nos acompañó, convivió con nosotros y desapareció.
Hoy, como comento en mi libro: ¿Por qué danzan los arqueros?, 5000 km tras la prehistoria y los lugares de poder (pp 151), la cueva se encuentra protegida, pero podemos observar desde el exterior su inmensidad, ya que en realidad estaríamos hablando de un abrigo de grandes dimensiones.
Si continuamos nuestro paseo, por esta maravillosa y tranquila ruta junto al río, llegaremos a dos abrigos con igual nomenclatura: Petxina I y II. Para llegar hasta ellos, deberemos ascender unos metros. El primero de ellos es una oquedad muy redondeada con una particularidad muy especial.
“El visitante que cierra los ojos (…) descubrirá como si las mismas corrientes del río que discurre a lo lejos, resbalaran absolutamente por las paredes de su espalda y pudiese sentir el frescor de esas aguas cristalinas”
¿Por qué danzan los arqueros? (pp. 153)
Si continuamos unos metros más arriba y hacia la izquierda, encontramos el gran abrigo de la Petxina II, donde en 1982 se localizarían varios paneles con pinturas levantinas y esquemáticas pertenecientes al neolítico medio.
Sería el mismo Breuil, en 1928, el que señalaría en este paraje la existencia de pinturas rupestres, hoy prácticamente desaparecidas y de donde las siguientes prospecciones se harían eco para localizar estos testigos gráficos de la prehistoria valenciana.
Los paneles en cuestión, muestran figuras humanas, barras y manchas, tanto de estilo levantino como esquemático[1]:
Además del arte rupestre prehistórico, encontramos pintadas encima de los paneles rupestres que me gustaría destacar: frase curiosa del graffitero en cuestión, que pinta encima de su propio pasado al que invita a respetar:
“Honra el pasado, Haz el futuro. F.N.”
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Por último y a medio camino entre Cova Negra y Cova de la Petxina, encontramos otra oquedad conocida como la
“Cova del barranc del´Águila”
donde se encuentran entre otros motivos, algunos peculiares jinetes a caballo, de cuya cronología no debe interpretarse como prehistórica según Hernández, Ferrer y Catalá en “El Arte Rupestre en el Estret de les Aigües”. Aunque sin duda la escena es poco habitual y muy interesante..
Fuente imagen: rutas arqueologicasporalicante
Desde luego es un lugar para recorrerlo y disfrutar de su silencio además de su pasado que seguro todavía esconde muchas cosas por descubrir..
© Viajes a la Prehistoria
[1] Hernández, Ferrer y Catalá, Centre d´estudis contestans (Cocentaina, Alicante). “El Arte Rupestre en el Estret de les Aigües (Bellús, Xátiva (Valencia).”. PDF.