EQUINOCCIO DE OTOÑO EN LOS DÓLMENES DE LA GIGANTA Y DEL GIGANTE

EQUINOCCIO DE OTOÑO EN LOS DÓLMENES DE LA GIGANTA Y DEL GIGANTE

Ya os adelantábamos que este equinoccio de otoño iba a ser especial, y tanto que lo ha sido. Esta mañana, hemos madrugado para comprobar y confirmar, si efectivamente y como pensábamos al ver las coordenadas  de dos dólmenes entre las provincias de Málaga y Cádiz, podrían haber sido construidos con la orientación equinoccial. Ha valido la pena madrugar. En solitario y en silencio, nos hemos adentrado en parajes deshabitados de la serranía de Ronda y el Gastor respectivamente y la sorpresa ha sido mayúscula, al observar con nuestros propios ojos, que no uno sino los dos dólmenes estaban efectivamente orientados a la salida del sol en esta fecha tan señalada para muchos de nuestros antepasados. Pero comencemos por el principio..

COMIENZA LA AVENTURA:

Son las 6 de la mañana y nos disponemos a salir en ruta en busca de la confirmación de una idea que nos ronda la cabeza desde hace algunas semanas: Algunos de los dólmenes de la provincia de Málaga y Cádiz pueden estar orientados hacia el equinoccio de otoño, como ya lo estuviera el dolmen de Viera y que pudimos disfrutar en años anteriores…

Tras haber buscado información sobre este fenómeno en ambos dólmenes y sin encontrar nada a cerca de la posible relación con este fenómeno, nos decidimos a comprobarlo por nosotros mismos, como ya hiciéramos en la Cueva del Parpalló de Gandía para narrarlo después en mi libro: ¿Por qué danzan los Arqueros? 5000 km tras la prehistoria y los lugares de poder.

Esta vez y debido a la falta de puesta en valor de estos monumentos prehistóricos tan especiales, hemos ido solos, sin acompañantes ni guías, puesto que no existe tal servicio.

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Pero allí estábamos, a las 8:00 a.m de la mañana, como un reloj, expectantes y ascendiendo por el camino que nos llevaba a ser protagonistas únicos de este fenómeno tan curioso y hermoso…

equinoccio de otoño

EL MOMENTO DEL EQUINOCCIO

A las 8:17 a.m y con una temperatura ambiente de 17 grados, el sol ha comenzado a despuntar por el horizonte. Allí, junto a la verja que rodea el Dolmen de la Giganta esperamos expectantes la salida del sol y el efecto lumínico que produce sobre los ortostatos y su corredor hacia la cámara funeraria final y las losas que la encierran…

Tras algunos minutos, comprobamos que efectivamente el fenómeno de alineamiento solar con el equinoccio de otoño se produce y el sol entra hasta la cámara final a través del corredor…

En primicia y en primera persona, podemos asegurar que el fenómeno al menos en la actualidad se produce y que probablemente fue en el momento de su construcción la orientación buscada para la construcción de esta tumba megalítica conocida como el Dolmen de la Giganta.

Nota: no se aprecia la entrada del sol por el corredor, puesto que un arbusto frondoso tapa casi de lleno y le hace sombra.

Audio experimental de ruta para comprobar y disfrutar del equinoccio de otoño. Puedes escucharlo en Ivoox aquí:

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DE DOLMEN A DOLMEN Y TIRO PORQUE ME TOCA

Así fueron nuestras primeras horas en este equinoccio de otoño, en el que 7 km en línea recta, que no en coche ni andando, nos separaban de dos dólmenes de los cuales deseábamos conocer su orientación. Tocaba ahora el turno al siguiente dolmen:

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LLEGADA AL DOLMEN DEL GIGANTE

Prácticamente corriendo, nos adentramos en el sendero cuesta arriba y empedrado que conduce al siguiente dolmen, con las indicaciones precisas y algunos paneles que encontramos en el camino, descubrimos que apenas 1 km a pie y el dolmen del Gigante estaría ante nuestros ojos.

La verdad es que caminábamos contrareloj, pues el sol iba siguiendo su ascenso, mientras nosotros tratábamos de comprobar in situ, la orientación y alineamiento equinoccial, como ya hicimos con el dolmen anterior.

 

Una vez arriba, en la cima, el dolmen, se nos antoja un poco más pequeño que el de la Giganta, a pesar del nombre que recibe. Conserva bastantes ortostatos así como las losas que cubren la minúscula entrada y parte de la cámara final. En la entrada al corredor, por cierto, uno debe de ponerse en cuclillas para poder entrar, de lo bajita que es, lo que se contradice con su nombre original. Observamos desde arriba del montículo de tierra que lo rodea, que el dolmen del Gigante se ensancha en su cámara final y que, a pesar de ser ya las 9 de la mañana, los rayos del sol todavía penetran en el interior de su corredor, por lo que es más que probable que también se encontrara orientado al equinoccio de otoño, como el anterior..

 

El lugar en el que se encuentra en el término del Gastor y no se encuentra vallado, por lo que es visitable y de fácil acceso.

¿SEGUIMOS LA RUTA?

Como era temprano y todavía quedaba mañana para largo, nos dispusimos a visitar otro lugar de especial relevancia para la prehistoria y para mi libro ¿Por qué danzan los Arqueros?…: La cueva de la Pileta y la Cueva del Gato, ambas en Benaojan…

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Y casi ya en el camino de vuelta no pudimos evitar desviarnos hacia otro de los dólmenes, de los muchos que conforman en entorno de la Serranía de Ronda. En este caso, nos encontramos junto a la carretera dirección a Algeciras, otro dolmen conocido como:

Dolmen de Encinas borrachas

Situado en una parcela privada, pero con acceso limitado, pudimos pasar al interior y ver de cerca los restos de este dolmen, que por desgracia no había corrido tanta suerte como los anteriores, ya que apenas quedaban ortostatos o cubiertas visibles en altura que nos pudieran orientar a cerca de las medidas exactas del mismo, aunque sí pudimos ver que también se trataba de una tumba megalítica de corredor, aunque sabemos que también esta datado en hace 6000 años y que al menos cinco individuos fueron enterrados en su interior..

Todavía queda mucho por visitar, pero esta vez, nuestros viajes a la prehistoria han dado frutos exquisitos, la comprobación de que al menos con seguridad, el dolmen de la Giganta si se encuentra orientado al equinoccio de otoño. Es emocionante ¿no? para nosotros lo fue..

© Viajes a la Prehistoria

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