Ya desde tiempos prehistóricos, este monte ha sido elegido por nuestros antepasados para rituales relacionados con la muerte y con el arte rupestre. Tanto es así que sus pinturas prehistóricas, repartidas por una gran cantidad de oquedades, datan, al menos de la edad de los metales. Pero, no solo encontramos arte rupestre en este monte, sino que además, una enorme cantidad de tumbas antropomorfas, están repartidas en este enorme camposanto, dicen de edad medieval, aunque las conclusiones no sean del todo claras.
Y es que, con tan solo observar desde la carretera que conduce a las playas de Bolonia este monte que corona una de las más bellas playas de la costa andaluza, no nos cabe duda de que esconde una magia especial. Un halo misterioso que le hace ser poseedor de un pasado que todavía tiene muchas cosas que contar.
[beautifulquote align=»full» cite=»»]Ya desde tiempos prehistóricos, este monte ha sido elegido por nuestros antepasados para rituales relacionados con la muerte y con el arte rupestre.[/beautifulquote]
El silencio y la paz que se respiran en su entorno, mientras nos disponemos a descubrir sus tumbas antropomorfas y su arte rupestre, nos hacen viajar a otro tiempos… a la prehistoria, a su pasado romano y quizás, como dicen algunos expertos a la época medieval, aunque personalmente, sigamos dudando de la autoría de las tumbas antropomorfas por gentes del Medievo…
La vistas, tanto a las playas de Tarifa como a la cercana “Africa”, hacen del cerro de San Bartolo, un sitio privilegiado, para escaparse y reunirse con uno mismo y meditar, mientras aprendemos a formar parte del entorno que nos rodea, a respetarlo, mimarlo y cuidarlo, como ya hicieran en otros tiempos nuestros ancestros…
Detalle de una de las tumbas justo al lado de la carretera.
La proximidad del importante y majestuoso yacimiento romano de Baelo Claudia, vuelven a coronar a este monte, como un lugar de tremenda importancia, con una de las canteras romanas descubiertas, en una de sus laderas más próximas a la zona de la costa y los acantilados.
Desde luego un lugar para repetir y repetir sin cansarte…
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