Los abrigos de Puerto Rico en Marbella fueron morada de neandertales y del calcolítico.
Marbella no deja de sorprendernos. Más allá de sus lujosas casas, fiestas, playas o turismo, Marbella tiene un pasado prehistórico y por supuesto, de neandertales también, al igual que muchas localidades costeras de la provincia de Málaga. Pero como es habitual que los grandes medios y publicaciones, agencias de turismo o incluso los propios ayuntamientos y diputaciones, den carpetazo a estos temas, por carecer de interés económico en la actualidad, desde viajes a la prehistoria, nos hacemos eco de algunos lugares en los que todavía se puede respirar y recrear como pudo ser la vida en la prehistoria.
Los abrigos de Puerto Rico, están ubicados muy cerca de “La Concha”, famosa montaña que cobija a los marbellíes. Y si son especialmente de interés prehistórico y arqueológico es precisamente por los hallazgos Neandertales y Neolíticos que se encontraron. Resulta espectacular por tanto, salir al campo, camino de “La cruz de Juanar”, por el camino de detrás del cementerio, siguiendo una senda bastante transitada y conocida y descubrir, que las oquedades que tienes enfrente, fueron morada de neandertales o de la prehistoria más reciente.
Así de sencillo. Sin un cartel, ni señalización, ni nada de nada que informe al visitante del patrimonio que tiene frente a sus ojos, tan solo los amantes de la escalada, parece que los conocen bien, puesto que suele ser habitual verles trepando por sus paredes escarpadas.
Cuando volvimos a casa e investigamos por Internet: Sorpresa más que mayúscula. Aquellos abrigos habían sido habitados por nuestros parientes prehistóricos en diferentes épocas.
Como pudimos comprobar en el catálogo de Patrimonio Inmueble de Andalucía, las tipologías de los asentamientos de los 5 abrigos catalogados corresponden al Paleolítico Medio, Neolítico medio y final, y la edad del cobre y bronce respectivamente[1].
Y entre el material hallado, se encuentran puntas levallois, material en superficie, cerámica del calcolítico y restos humanos que podrían dar lugar a interpretar los abrigos con usos funerarios[2]. Casi nada. Y los abrigos se encuentran ahí, desconocidos para mucha gente y sin recibir ningún tipo de intervención que pudiese dar lugar a nuevas investigaciones importantes para el conocimiento de la prehistoria en esta zona de la Península Ibérica.
Aún así, nos gustaría destacar que se trata de una ruta muy entretenida, con vistas fantásticas al mar, a la ciudad de Marbella e incluso al Estrecho de Gibraltar en días muy claros. Y recomendada para grandes y pequeños, en plena naturaleza y con algunos senderos ya marcados. Es recomendable llevar agua, puesto que gran parte de su acceso es cuesta arriba y no dispone de mucha sombra. Así mismo es recomendable el calzado adecuado, ya que algunas zonas son de gravilla y es fácil torcerse un tobillo o resbalarse.
El acceso a algunos de los abrigos no es complicado pero no se recomienda el acceso a todos sin material adecuado y sin los conocimientos necesarios, pues no todos son igual de seguros y tenemos que actuar con sentido común y dentro de nuestras posibilidades. Pero por lo demás, existen un par de abrigos que gozan de unas vistas espectaculares, con grandes y altos techos, silencio y mucha tranquilidad, para escaparse del ajetreado turismo de la ciudad.
[1] Fuente: http://www.iaph.es/patrimonio-inmueble-andalucia/resumen.do?id=i18064. Fecha de consulta: 2 de Marzo de 2016.
[2] Fuente: http://www.iaph.es/patrimonio-inmueble-andalucia/resumen.do?id=i18064 Op.cit.
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Un entorno favorable para realizar numerosas actividades al aire libre. Muy cerca se encuentran estos abrigos y la cueva. Para los que todavía no lo han visitado os animamos a que pronto podáis visitarlas.