La cueva de Santimamiñe situada junto al Bosque de Oma, es uno de los grandes atractivos de la costa de Bizkaia.
A pesar de que solo nos dejarán presenciar la entrada de la cueva por protección y conservación de las pinturas rupestres que se encuentran en su interior, viajar hasta las costas de Bizkaia, en pleno corazón de la reserva de Urdaibai desde la Histórica ciudad de Gernika y escaparse antes de llegar a las playas de Laida y Laga camino de Lekeitio por una ruta que nos conduce hacía el Bosque de Oma y la Cueva de Santimamiñe nos aportará un extra de bienestar, tranquilidad, desconexión y la oportunidad de adentrarse en un lugar sublime y único, como suelen ser muchos rincones del País Vasco, donde el otoño, nos recibe con su alfombra de ocres, naranjas, verdes, rojos y amarillos, abriéndonos senderos que nos conducen a la prehistoria más remota de esta región. Sus pinturas, muy adentro de la cueva de Santimamiñe nos muestran bisontes y caballos. Pero más allá de poder verlos o no, tan solo el hecho de recorrer esta ruta, tan próxima por otra parte al famoso bosque de Oma, en un entorno cargado de poder y espectacular belleza en cualquier época del año, hacen de la cueva de Santimamiñe un enclave para convivir en un mismo plano con la naturaleza, como ya lo hicieron nuestros ancestros, será porqué un fuerte potencial energético se esconde tras la miradas furtivas de viajeros despistados que no ven más allá que aquello que le marca el objetivo de sus cámaras?. Cierren sus ojos, sientan el lugar, déjense arrastrar por las fuerzas invisibles que habitan en esta tierra mágica de Bizkaia y ya nos contarán su experiencia…
© Viajes a la Prehistoria
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